11 de abril de 2011

Manifiesto del Partido Comunista de Euskadi para el 14 de abril

Secretaría de Movimiento republicano y Memoria Histórica del PCE-EPK


 
Hace 80 años, la clase obrera y los sectores populares, las gentes de la cultura, de la ciencia y de la universidad, junto a los partidos políticos progresistas y de izquierdas propiciaron con su victoria en las elecciones municipales un proceso constituyente democrático y participativo que trajo como resultado la II Republica.

 
El Pueblo se sintió por primera vez dueño de su destino y el Borbón tuvo que salir del país.

La II República hizo suya esa ilusión popular y afrontó la transformación de un país atrasado y analfabeto al servicio de una monarquía cuajada de señores, rentistas, curas y militares, en un país moderno, gestionado por una república en interés del pueblo, de la mayoría. La Constitución Republicana de 1931 establecía “Una República de trabajadores de todas clases”, reconocía el voto y la patria potestad a la mujer, el divorcio y un Estado laico con plena libertad de conciencia y de culto. Para la erradicación del analfabetismo secular, la República construyó 6750 escuelas y formó 7000 maestros y maestras; inició una Reforma Agraria que buscaba repartir los latifundios ociosos entre los más de dos millones de labradores sin tierra; estableció la jornada de 8 horas; fomentó la participación social y política de las clases populares y la negociación entre patronos y trabajadores.

 
Los comunistas vascos, al conmemorar el 14 de Abril, nos reafirmamos en los ideales de Libertad, Igualdad y Fraternidad, así como en los valores que, contenidos en la Constitución de la II República, representaron avances democráticos muy significativos en cuanto a libertades y derechos sociales para la ciudadanía de entonces. Experiencia dolorosamente truncada por el golpe fascista de 1936, que provocó una infame guerra civil y que llevó a nuestro país, tras la derrota de la República, al período más negro y criminal de su historia. La dictadura fascista. Conviene recordar que la élite monárquica, caciquil, adinerada y católica, con el decisivo apoyo de la Alemania e Italia fascistas, ahogó en sangre esta II República, para implantar una Dictadura de 40 años dirigida a re-establecer sus privilegiadas posiciones a costa del pueblo. Y también, que la Transición pactada, lejos de depurar ese Estado y esa política para las élites, los legitimó. Lo que ha tenido consecuencias en esta Democracia.

Cuarenta años, sin libertades, sin derechos y sin justicia que truncaron toda expectativa, todo anhelo de un país moderno, social y democráticamente avanzado.



Cuando caminamos hacia los 5 millones de parados y paradas en todo el estado, más de 200.000 entre la CAV y Navarra, las propuestas del Gobierno del PSOE en España y Euskadi, y de la derecha (UPN) en Navarra, con el apoyo de la patronal y los demás partidos de derecha (PP, PNV, CIU…) se circunscriben a recortar derechos sociales, económicos y políticos de la mayoría de la ciudadanía y ayudar a la gran banca y al gran capital con dinero público.

 
Para ayudar a la salida conservadora de la crisis se recortan libertades democráticas para que sean unas oscuras leyes del mercado las que nos gobiernen en benéfico de unos pocos, y para facilitar esta tarea se blinda un modelo de Estado monárquico y bipartidista. Por lo que denunciamos la censura y el blindaje de los grandes poderes sobre el debate monarquía-republica, blindaje que secuestra a los ciudadanos y ciudadanas, tratando de mantener a la monarquía sobre el miedo, el oscurantismo y la ignorancia, no es causal que el propio monarca se haya implicado personalmente en forzar el consenso en torno a una salida conservadora a la crisis.

 
Por lo tanto cuando desde el PCE-EPK planteamos el objetivo de conquistar la III Republica, lo hacemos con el objetivo de que sirva para avanzar hacia una alternativa global al actual sistema que nos ha llevado a la mayor crisis de la historia reciente de España.

 
La situación nos llama a dejar el individualismo, la indiferencia, el consumismo… y salir a la calle, unidos/as, a reivindicar otro Estado, otra democracia y otra política, al servicio del pueblo.

Necesitamos otra política en la que los derechos y los recursos sean producidos, gestionados democrática y participativamente en beneficio de la mayoría: La República laica, de trabajadoras/os y ciudadanos/as, es la alternativa. Una República Federal Solidaria puede hacer útil y satisfactoria la participación ciudadana y aunar en su seno a todos los pueblos del Estado.

Es por eso que salimos a la calle a invitar a los/as trabajadores y ciudadanos a sumarse al movimiento que en el Estado está reivindicando un Proceso Constituyente pacífico y democrático que nos conduzca a la Tercera República.




En función de este ideal emancipador hacemos una serie de precisiones para empezar a concretarlo:



1- La Primera y la Segunda República son para nosotros una referencia histórica indispensable para marcar el hilo conductor del pensamiento republicano así como para recoger y actualizar aquellas aportaciones y propuestas que sirvan para este siglo XXI. Queremos decir que la mayor parte de nuestro esfuerzo debe dedicarse al hoy y al mañana.



2- En consecuencia, la República no es otra cosa que el marco económico, social, político, cultural e institucional del cual los ciudadanos y ciudadanas se dotan libremente y por el que se consienten para afrontar los problemas y sus soluciones. Es la respuesta a sus problemas.



3- Por lo tanto el proyecto republicano no debe ser encasillado en función de la terminología referida a espacios en el espectro político. Tenemos que darle a la palabra República una entidad de propuesta que la haga más accesible y llamativa; La República es libertad, igualdad y solidaridad, así como la reforma económica, social, política, ideológica y de nuevos valores a la situación real.



4- En el campo de la memoria histórica, el PCE-EPK se pronuncia por una ley que anule los juicios del franquismo y que garantice un entierro digno a todos los defensores de la legalidad republicana, que se encuentran hoy en las foses comunes a lo largo y ancho de nuestro país.



5- El PCE-EPK, hace un llamamiento a todos los ayuntamientos de Euskadi y Navarra a integrarse en la Red de Municipios por la Tercera República. El municipalismo en el estado Español tiene una tradición histórica de lucha por la República.





La República, no es otra cosa que la gestión democrática del Estado y de lo Público en base al interés general. Por ello, no habrá república de ciudadanos sin democracia y no habrá democracia sin la participación de la ciudadanía. Consecuentemente, es necesario que los republicanos nos impliquemos más en la tarea de transmitir nuestros valores, de republicanizar todos los espacios políticos y sociales, teniéndolos presentes en nuestra actividad y esfuerzos cotidianos. La República sólo se conseguirá conquistando espacios de poder a las fuerzas conservadoras de las oligarquías políticas, religiosas y financieras que hoy lo detentan.



Por eso este 14 de abril saldremos a la calle con alegría pero con determinación porque estamos seguros de que no hay 2 sin tres, estamos convencidos de que mas pronto que tarde la bandera tricolor ondeara en los edificios públicos, tal y como ya hiciera hace 80 años.